Impuestos “saludables”

Y QUÉ TAL SI SE ELIMINAN LOS “IMPUESTOS SALUDABLES” A LOS DERIVADOS DE LA LECHE

 

Panorama General

En el Congreso cursa un proyecto que busca modificar el régimen tributario sobre productos lácteos en Colombia, excluyendo a ciertos derivados de la leche de los llamados ‘impuestos saludables’ que fueron introducidos en la reforma tributaria de 2022. La propuesta incluye tanto derivados líquidos, como yogures y leches fermentadas, como derivados sólidos, como quesos y mantequillas, en la lista de excepciones del impuesto a productos ultra procesados y con alto contenido de azúcares añadidos.

El Proyecto de Ley No. 291 de 2024C, tiene como propósito modificar el régimen tributario sobre productos lácteos en Colombia, excluyendo a ciertos derivados de la leche de los llamados ‘impuestos saludables’ que fueron introducidos en la reforma tributaria de 2022. La propuesta incluye tanto derivados líquidos, como yogures y leches fermentadas, como derivados sólidos, como quesos y mantequillas, en la lista de excepciones del impuesto a productos ultra procesados y con alto contenido de azúcares añadidos.

 

EL PROPÓSITO DEL PROYECTO

El proyecto de ley, busca agregar al listado de productos exentos del gravamen (Parágrafo 1 del artículo 513-1) a:  “Los yogures, los kumis, las leches fermentadas larga vida y las leches saborizadas.” Así como los siguientes (Parágrafo 5 del artículo 513-6): “Las cremas de leche, las mantequillas, los aceites o grasas de mantequilla, los quesos, los sueros, el manjar blanco, las leches condensadas azucaradas, los postres de leche y los helados se encuentran exentos del impuesto a los productos comestibles ultraprocesados industrialmente y/o con alto contenido de azúcares añadidos, sodio o grasas saturadas.”

 

JUSTIFICACIÓN DE LA EXCEPCIÓN EN EL SECTOR LÁCTEO

Si bien, los estudios analizados no muestran efectos colaterales sobre otros sectores industriales, en el caso Colombiano, la implementación de los impuestos a los alimentos y bebidas ultra procesadas, trajeron consigo, grandes afectaciones para otras industrias. 

Ana María Gómez, presidente de Asoleche expresó su preocupación por la situación de la industria láctea en el país, que había sido afectada por la disminución del consumo y el aumento de los costos debido a nuevos impuestos. Gómez explicó que la caída en el consumo de leche y sus derivados, que se redujo un 9% en 2022 y un 6% en 2023, obedecía principalmente a la menor capacidad adquisitiva de los colombianos y al impacto de la inflación.

La industria láctea también enfrentó dificultades adicionales por el incremento de la carga impositiva, con la implementación de impuestos a los productos ultraprocesados y plásticos de un solo uso, lo que complicó aún más la estructura de costos de las empresas. Si bien, la restricción normativa buscaba gravar productos utraprocesados y elevados en azúcares, terminó por afectar, indistintamente, a la industria lechera.  Ante esto, el sector impulsó varias promociones para incentivar el consumo, aunque los resultados no fueron concluyentes.

 

OPORTUNIDADES DE MEJORA

  1. Ampliación del alcance: El proyecto podría extenderse a otros productos que, aunque no sean lácteos, también aportan beneficios nutricionales y se ven afectados por los impuestos saludables.
  1. Incentivos a productores locales: Incorporar políticas que no solo beneficien al consumidor mediante la exoneración de impuestos, sino que también apoyen directamente a los productores lácteos.
  1. Promoción de la educación alimentaria: El proyecto podría incluir medidas complementarias para educar al público sobre la importancia del consumo de lácteos dentro de una dieta balanceada, incentivando así una mayor demanda.

 

PUNTOS A FAVOR Y EN CONTRA

Implicaciones positivas:

    1. Aumento en el consumo de productos lácteos derivados de la reducción de su precio final.
    2. Mejora en la situación económica de los productores de leche y sus derivados, al reducir la carga impositiva sobre estos productos.
    3. Contribución a una mejor nutrición de la población, especialmente en un país donde millones de personas padecen hambre.

 

Limitaciones:

    1. Posible impacto fiscal negativo debido a la reducción de ingresos tributarios, lo cual debe analizarse con mayor profundidad.
    2. La exclusión de los productos lácteos podría abrir la puerta a demandas de otros sectores productivos para también ser exonerados de este tipo de impuestos, complicando la administración tributaria.

 

Bogotá, octubre 8 de 2024

 

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